
Te sugerimos repetir esta frase: “Me apruebo” =continuamente repítela= Esta es una poderosa base. Continúa haciéndolo durante un mes cuando menos.
Ahora, toma un cuaderno y arriba escribe: “ME AMO, POR TANTO…..”
Termina esta oración en todas las formas que puedas. Léela todos los días y agrégale todo lo nuevo que se te ocurra.
Si puedes trabajar con un compañero, hazlo. Tómalo de las manos y díganse alternativamente: “Me amo por tanto…” El mayor beneficio que se obtiene al realizar este ejercicio consiste en que aprendes que es casi imposible menospreciarte cuando dices que te amas.
*Extraído de el libro Tú puedes sanar tu vida- Louise L. Hay
¡Soy feliz!